Cada edificio residencial consume una determinada cantidad de energía durante el año, que es necesaria para el uso diario. Se proporciona un índice EP especial para este propósito. Este parámetro está sistematizado por la ordenanza de condiciones técnicas. Por lo tanto, vale la pena averiguar qué valor puede alcanzar un edificio residencial ahora y en los próximos años.
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Indicador EP: definición y valores del indicador
El factor EP de un edificio determina la cantidad de energía primaria no renovable. Este parámetro es el índice de energía primaria no renovable necesaria para calefacción, refrigeración, iluminación, ventilación y producción de agua caliente sanitaria. ¿Cuáles son los valores del índice de energía primaria? Actualmente, la energía primaria no renovable para un edificio unifamiliar no puede exceder los 95 kWh / (m2 * año). Sin embargo, el 1 de enero de 2022, el reglamento de condiciones técnicas obliga a reducir este valor a 70 kWh (m2 * año).
Los supuestos de reducción del valor del índice EP contenidos en el reglamento no carecen de importancia. Porque nos esforzamos en minimizar el consumo de energía no renovable, es decir, la energía que tiene sus fuentes, entre otras en combustibles fósiles. Esto es principalmente para proteger el medio ambiente. Los edificios nuevos cuentan con un certificado energético con información sobre el nivel de consumo de energía primaria no renovable. Por otro lado, la cogeneración en vivienda unifamiliar se aplicará a una situación en la que la normativa exija una reducción del índice EP, pero la vivienda no sea capaz de cumplir estos requisitos. Si busca más información, consulte también este artículo sobre el certificado energético del edificio.
Coeficiente EP del edificio - factores
La energía primaria no renovable, es decir, el índice EP, depende de muchos factores. Estos incluyen, entre otros:
- Tipo y calidad del aislamiento del edificio.
- Tipo de ventilación - si utilizamos un recuperador, el coeficiente EP del edificio tendrá un valor menor. El dispositivo es responsable de la recuperación de calor, lo que reduce el consumo de energía para el aislamiento térmico del edificio.
- El tipo de fuentes de energía adicionales utilizadas (principalmente renovables): el coeficiente EP de un edificio es importante, p. Ej. paneles solares, fotovoltaicos o bombas de calor
- Ubicación del edificio: no se trata solo de la región climática, sino también de la ubicación geográfica exacta. Los edificios unifamiliares ubicados en el Este y Sur del país están expuestos a un mayor consumo de energía térmica en comparación con las casas ubicadas en el Oeste o incluso en Polonia Central.
- Arquitectura y materiales de construcción usados: en este caso, por ejemplo, son importantes numerosos acristalamientos, que hacen que el edificio se caliente en gran medida por los rayos del sol. También son importantes los materiales de construcción utilizados, que se caracterizan por un aislamiento térmico a un cierto nivel.
La solución de futuro para reducir el índice EP es la cogeneración en vivienda unifamiliar. La definición de esta alternativa esconde un dispositivo llamado unidad CHP. Su tarea es generar calor y electricidad de forma independiente. En comparación con la energía obtenida de fuentes de energía renovables, la cogeneración en una casa unifamiliar es lenta, p. Ej. de las condiciones climáticas actuales. Las unidades de cogeneración modernas funcionan sobre la base de un motor de combustión interna. Sin embargo, el trabajo sobre el uso de hidrógeno aún está en curso. Por tanto, el futuro de la cogeneración en una vivienda unifamiliar parece prometedor. Especialmente que la reacción del oxígeno con el hidrógeno genera energía térmica, entendida incluso como un efecto secundario. Dicho complemento se debe utilizar para calentar no solo agua caliente sanitaria, sino también todo el edificio.
Indicador EK - definición
Sabiendo qué es la energía primaria no renovable, conviene recordar que la normativa sobre condiciones técnicas también se aplica al indicador EK. La definición de EK nos dice acerca de la energía que realmente usamos durante el año. Por tanto, es la energía final expresada en kWh / m2 * año. El indicador EK incluye el uso no solo, por ejemplo, de combustibles sólidos, sino también de la electricidad necesaria para calentar el edificio.
Si está interesado en ahorrar energía final, debe averiguar cuál es el índice de energía útil y si la energía final es menor o mayor que este parámetro. La estructura del edificio también es importante a la hora de comprobar cuáles son los ahorros de energía finales. Determina en gran medida si las pérdidas de energía térmica son muy grandes o si no hay particiones con fugas importantes. También vale la pena echar un vistazo a las instalaciones en sí, si son funcionales o están demasiado desactualizadas. A menudo, el ahorro de energía final se puede lograr modernizando la instalación eléctrica o simplemente reemplazando la caldera de calefacción por un modelo más nuevo y eficiente.
Teniendo en cuenta lo que es la energía primaria, la energía final, además del ahorro de energía final, tenemos un impacto consciente en el consumo de calor y electricidad. De todos modos, aquí es donde se dirige la construcción pasiva moderna, para que la energía final se mantenga lo más baja posible.
Energía renovable e índice EP
La forma más sencilla de reducir la demanda de energía primaria es a través de fuentes de energía renovables. Sin embargo, el tipo de esta energía también es importante. Es decir, el nivel más bajo del índice EP se obtendrá eligiendo fuentes renovables como la energía solar, geotérmica o eólica. Porque solo en estos casos el factor de entrada de energía primaria no renovable se mantendrá en cero.
La biomasa ocupa el segundo lugar, con el coeficiente de 0,2 antes mencionado. Por otro lado, a modo de comparación, los combustibles tradicionales, como la hulla, el gas natural o el gasóleo para calefacción, tienen un coeficiente de entrada de energía primaria no renovable de hasta 1,1. El nivel más alto, hasta 3.0, se suministra con electricidad para el edificio. Tal conocimiento muestra que es posible gestionar la energía para que su consumo sea lo más bajo posible.